Much@s no lo saben, ¿y tú, sabes reconocer tu tipo de piel?

Es esencial tener muy claro qué tipo de piel tenemos para saber los tratamientos dermocosméticos que necesitamos para conseguir que nuestra piel luzca sana.  Aunque parezca una pregunta obvia y que nos encontremos con mucha información en la red, es un problema constante que observamos mucho en la parafarmacia.  No siempre es fácil reconocer nuestro tipo de piel y muchas veces compramos cosméticos equivocados que empeorarán nuestra piel.

Un pequeño ejemplo sin final:

– Clienta X: “Buenos días, quería una crema para piel seca.”

Y ya en la primera visual nos damos cuenta que no se trata de una piel seca. Pero preguntamos: “¿En qué notas que es seca?”.

– Clienta X: “Me tira mucho, se tensa y estoy con sensación de inconfort. Y además muchas veces tiene escamas.”

Nos acercamos, evaluamos pero efectivamente no es una piel seca, más bien todo lo contrario, es una piel grasa deshidratada. A continuación, encontraremos la explicación.

     Tipos de piel

No existe una propiedad que permite aunar todos los tipos de piel y existen varias calificaciones dependiendo del grosor de la epidermis, el estado de la dermis, por la secreción glándula sebácea y por la edad de la persona.

Por ahora, lo que más nos interesa es la clasificación por la secreción glándula sebácea. Son los tipos que más nos suenan por verlos siempre presentes en las cajas de los dermocosméticos: piel normal, piel seca, piel grasa, piel mixta.

a) Piel normal

Es la que todos queremos tener pero que pocos privilegiados tienen. Una piel suave, rosada. La definimos comúnmente como “piel de bebé”.

b) Piel seca

Se caracteriza por una disminución de la producción de grasa y suele presentar descamación, rojeces, picazón, tirantez y envejecimiento prematuro. Aunque la piel seca se puede tratar con una serie de cuidados para mantenerla en buenas condiciones, siempre seguirá siendo una piel seca.

En este momento aparecen las confusiones: piel seca y piel deshidratada. Muchos confunden la piel seca con la piel deshidratada, llegando a utilizar los términos de igual manera. Pero no es lo mismo una piel seca que una piel deshidratada.

La piel deshidratada es una condición de la piel, y por lo general, suele ser temporal. La deshidratación está provocada por bajos niveles de humedad. La piel seca es una carencia de lípidos (componentes grasos) y la piel deshidratada de lo que carece es de agua. Comparten síntomas que nos pueden llevar a confusión: la tirantez, la sensibilidad y el envejecimiento prematuro.

Los tratamientos dermocosméticos serán diferentes: la piel seca se trata con sustancias humectantes y aceites vegetales ricos en ácidos grasos poliinsaturados; la piel deshidratada se trata con  tratamientos humectantes que retengan el agua, pero nada de aceites.

c) Piel grasa

Lo que más caracteriza la piel grasa es un aumento de producción sebácea. En la piel grasa podemos diferenciar 3 tipos:

Piel grasa: de aspecto brillante, gruesa, poros dilatados y con tendencia a puntos negros y granitos.

Piel grasa asfíctica: es la conocida piel acneica. Se caracteriza por impedir la salida de la grasa sebácea del canal folicular produciendo la espinilla y el comedón.

Piel grasa deshidratada: el exceso de sebo no impide que la piel se pueda deshidratar. Los causantes de esta deshidratación suelen ser agentes externos como el frío, el calor, el viento, la edad, usar productos cosméticos inadecuados.

¿Cómo reconocer la piel grasa deshidratada de una piel grasa?

Hay diferentes características que delatan la presencia de deshidratación:

  1. Tendremos una combinación de zonas brillantes con zonas descamadas.
  2. La textura de la piel es áspera y rugosa. Presenta una pérdida de elasticidad, está más tensa.
  3. Poros muy dilatados
  4. Aspecto cansado, falta de luminosidad.
  5. Aparecen pequeñas arrugas de deshidratación bajo los ojos, los pómulos y la boca cuando está en tensión.
  6. Piel Mixta

Se caracteriza por la presencia de piel grasa en la zona T facial (frente, nariz y mentón) y el resto de la cara es piel normal/seca. Suele ser el tipo de piel que más domina.

Seguro que ahora ya tienes claro porque hemos diagnosticado una piel grasa deshidratada. Hemos observado que en la piel de la clienta había en zonas,  brillos y unos poros muy dilatados con presencia de puntos negros y espinillas. Además al hablar y sonreír, se notaban arrugas y estrías alrededor de los labios y del contorno del ojo. En estos casos, siempre recomendamos dermocosméticos en geles o en cremigeles, como por ejemplo:

Vichy Aqualia Termal Gel-Crema, Apivita Aqua Vita Pieles grasas o Filorga Hydra Filler Mat.

Recuerda

Antes de comprar cualquier producto de dermocosmética, identifica bien tu tipo de piel, para elegir el más adecuado. Puedes encontrar un pequeño test en Clara (www.clara.es/belleza/cara/test-descubre-cual-tipo-piel-como-cuidarla_646) Y además, no solo el tratamiento es importante, la higiene facial es el primer paso, o ¿friegas antes de barrer?